Cuando postergar puede ser productivo
Aprovecha tu tendencia a procrastinar para lograr más sin sentir culpa.
Ayer en el boletín de las notas atómicas hablamos de este tema de manera superficial, debido a que todos llegamos a posponer tareas importantes para hacer otras menos urgentes.
¿Qué es la procrastinación estructurada?
Este concepto fue desarrollado por el filósofo John Perry y se basa en la idea de que, en lugar de evitar por completo el trabajo, llegar a redirigir nuestra energía hacia tareas valiosas mientras evitamos la que más nos cuesta iniciar.
La intención es de contar una lista de tareas jerarquizadas:
Parte superior: Lo que parece urgente e importante.
Parte inferior: Las tareas que tienen valor, pero que parecen más accesibles o atractivas.
Al procrastinar la tarea principal, terminamos realizando otras que también son significativas, engañándonos y nos sentimos más productivos. Al postergar muchas veces, nuestro subconsciente sigue trabajando en ello mientras hacemos otras cosas y al volver nos da mejores ideas o enfoques para completarla.
A diferencia de lo que tenemos en “Empezar con la tarea mas compleja al inicio” Eat That Frog - Comete esa Rana que primero hacemos la tarea mas difícil y después con las más simples.
Tienes estrategias propias para lidiar con la procrastinación
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